I.-
INTRODUCCION
Los elementos y valores de toda naturaleza provenientes de los haitianos se
han ido sedimentando en la realidad cubana durante años, convirtiéndose en
parte inseparable del desarrollo integral de toda la sociedad.
El haitiano, centro de ese intercambio en tanto objeto y sujeto del proceso
mutuo de influencia cultural, ha tenido en diversas etapas comportamientos de
defensa de sus hábitos, costumbres, creencias, etc., el ser sojuzgado y discriminado sistemáticamente, ante la
agresión a que estuvo sometido durante años por los otros integrantes de la
sociedad hasta el 1959.
Aún cuando los haitianos autóctonos mantuvieron una tendencia hacia una forma de vivir abroquelada, defensiva, de autoformación, encerrada en sí misma respecto al resto de la sociedad, no fueron ellos, ni sobre todos sus descendientes, totalmente ajenos a la asimilación creativa de la realidad circundante, de los avances de la economía, la ciencia, la tecnología, la cultura, en fin, del desarrollo de la sociedad cubana.
Aún cuando los haitianos autóctonos mantuvieron una tendencia hacia una forma de vivir abroquelada, defensiva, de autoformación, encerrada en sí misma respecto al resto de la sociedad, no fueron ellos, ni sobre todos sus descendientes, totalmente ajenos a la asimilación creativa de la realidad circundante, de los avances de la economía, la ciencia, la tecnología, la cultura, en fin, del desarrollo de la sociedad cubana.
Así ha transcurrido la preservación y afirmación de su identidad cultural,
de sus hábitos sociales y actitudes individuales, que conforman hoy día el
estilo de vida y de trabajo, las manifestaciones de su participación activa en
la vida cultural del país.
La cultura es considerada como medio de acceso a una existencia
intelectual, afectiva, moral y espiritual mas elevada.
El haitiano en Cuba ha accionado por rescatar y mantener vivas sus
costumbres y tradiciones, el folclor y su identidad étnica en las actuales y
futuras generaciones de sus descendientes.
La divulgación sobre la historia de Haití, sus creencias, sus ritos, sus
canciones, sus danzas y otras riquezas de su cultura han estado al lado de la
transmisión de su educación familiar y del respeto a los mayores como una
cotidiana necesidad en el seno de la comunidad de haitianos y sus descendientes
en la isla.
Contribuir a la preservación, diseminación y continuidad de los valores
culturales de esta población caribeña y sus descendientes en el contexto cubano
se convierte entonces en él en una práctica a mantener de una manera
consecuente.
Sobre todo ello se despliega en estos momentos
diversas investigaciones e intercambios de experiencias para alcanzar una
integral caracterización de las expresiones de lo haitiano en la dimensión
cultural del pueblo cubano.
¿Qué ha caracterizado a la dimensión cultural del elemento haitiano dentro
de la nacionalidad cubana?
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